¡Feliz Cumpleaños Brujita!

LA CHAQUETA (Primera parte)

Para un caballero en bicicleta...

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Estaba recién comprada la chaqueta y ya iba siendo tema de discordia. Hasta llegó a sembrarnos la duda de si valdría la pena seguir juntos.

Serían las diez de la noche cuando el bus se iba acercando al paradero de su casa. Ahí estaba esperándome, un poco enfermo por el frío, simpático y motivado por la idea de ir a dar un paseo por el parque. Me alegraba que se diera cuenta del estilo que llevaba para ir a verlo: botas negras, pantalón a rayas, una boina gris y la chaqueta: mi última adquisición unas horas antes.

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Siete botones negros grandes resaltaban con su intento de ser a cuadros, entre hilos grises, negros, rojos, blancos y naranjas. Aunque al lucirla parecía ya en embarazo, pues la chaqueta en su nueva moda de otra época era ancha como de muñeca, me gustaba; era grande y sobre todo cómoda para el invierno que se acercaba.

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-"Tengo una pregunta, ¿es verdad que los colombianos y las colombianas duermen en la noche con la chaqueta puesta?"

Ya para esa entonces se manifestaba su deseo de llamar a casa a pesar de las siete horas de diferencia.

Deidad femenina

ENTRAÑAS

Entre presagios y deseos 2

El niño.

Piedritas en los ojos

Justo llegan antes de dormir,
cansadas y arrugadas se vuelven más perezosas,
más carrasposas, más secas.

Ellas me hacen recordarla,
recordar la vejez a la que nunca pudo llegar.
Me la traen,
me la hacen imaginar sentada en aquél rincón del cuarto del tejido donde daba clases.

Hoy a la víspera de esas cosas de la vida que pasan y que no se pueden evitar,
me molestan las piedritas, no me dejan ver.

Supongo que no me he sabido desmaquillar bien,
seguro que habrán quedado residuos del rosa y del negro,
del sol de hoy.

Ciudad nuestra

Maurice

Un día de los primeros

"No te vayas."
¡Cómo aprendes de rápido!,
"vuelve pronto..."

Me sorprendes,
qué manera de seducirme.
Y ese dolorcito en el pecho
por dejarte a las siete de la mañana
entre te amos de dormido y de despierto;
entre sábanas de cuadrados me dejas por un instante, sin aire.
Tomo fuerzas en las piernas
y sin pensarlo mucho, me levanto.
Y aunque duele, salgo rápido por una de las puertas.

"No te vayas" es lo último que escucho.

Regreso

Estoy buscando la mejor forma de regresar; busco un regreso sin tanto dolor, sin tanto peso a mis espaldas; busco un regreso lleno de buenos recuerdos, sin tanta nostalgia alborotada en mis rodillas, sin tanta melancolía al apagarse el sol.
Pienso y siento, vivo las horas de una partida a la que le temo…me da miedo morir de dolor, me da pánico dejarlo a él, mirar por una ventanita y ya no verlo más, no poderme despedir de un gran amor.
Temo y preveo, melancolía y nostalgia futura…
Estoy buscando un regreso, un regreso que no duela tanto, que no me torture cada noche al contemplar sus ojitos cerrados… qué bueno sería tomarme la píldora de la que él me hablaba anoche…una que me haga olvidar, una que embolate el hambre de amar.
Estoy en busca de ese regreso: tranquilo, meditabundo, que me saque una sonrisa de agradecimiento, porque han sido muchos los que han llegado a mi vida en estos dos últimos años, han sido muchas historias bellas, ha sido amor.

Son 15 los que nos llevamos

Esas cosas que no se dicen

Quiero que me sorprendas con los ojos cerrados,
y que yo imagine la manera en que te vas acercando,
como un gato al acecho,
fijando y sonriendo con los ojos tus labios,

con los labios tus hoyuelos.

Pero tengo el sentimiento de que será más grande la curiosidad, arrinconada en el dedo gordo de mi pie derecho,
que abriré los ojos, justo cuando por tu pensamiento pasaba la dulce idea de creer, que tu angelito estaba durmiendo.

Laura, simplemente Laura

Flor de un día